El té rojo se conoce como el té de los emperadores, ya que antiguamente estaba reservado para la alta nobleza. Lo que caracteriza a un Pu erh es que ha sido fermentado además de oxidado.

El proceso de elaboración de este té se descubrió casualmente al tratar de alargar la conservación del té verde. Para ello, lo sometieron a una fermentación que lo hacía más resistente y este proceso le añadió nuevas propiedades curativas.

Su sabor es terroso, con un toque ahumado y el tono de la infusión rojizo oscuro.

Este té verde mezclado con menta es el típico te moruno. El té verde es uno de los mayores antioxidantes que nos podemos encontrar. Es diurético y muy rico en flúor.

El Kukicha, menos comúnmente llamado Bocha, es un té verde japonés hecho de los tallos y ramas de la planta del té. El Kukicha tiene un sabor y aroma únicos.

El té verde kukicha también es conocido como el té de los 3 años, tiene bajo contenido en teína.

El té verde es el más antiguo y tradicional y se caracteriza porque para su elaboración se utilizan las hojas del té sin oxidar. Es por lo tanto un té no oxidado.

El Gunpowder es un té verde cuyo nombre parece provenir de la forma que adoptan sus hojas una vez elaboradas asemejándose estas, a bolitas de pólvora. Estas pequeñas bolas se abren en el agua y dan una infusión fuerte de color verde cobre y sabor intenso. Casi todo se produce en Pingshui, provincia de Zhejian.

El matcha proviene de procesar las hojas de té verde y es el té empleado para la tradicional ceremonia japonesa del té. Su color verde es debido a la potente clorofila que depura la sangre y equilibra el PH del cuerpo. Con un poderoso aroma, el matcha aporta vitaminas, minerales, antioxidantes y fitonutrientes.

El té Oolong es una variedad con un punto intermedio entre un té verde y un té negro. El Oolong Altar de las Flores es una mezcla de hojas de té y pétalos. Es muy aromático y tiene un característico sabor herbal.

El té verde Aqualia se caracteriza por su alto poder diurético, tiene un sabor afrutado y herbal.

Esta combinación de plantas con té verde hacen de él el más diurético, ya que la cola de caballo, la ortiga o la piña nos ayuda de forma notable a la eliminación de líquidos, toxinas...

Esta combinación lleva en su mayor parte té blanco pai mu tan, con algo de té verde Sencha y marcado sabor a naranja. Combinación irresistible y al mismo tiempo reparadora.

El té blanco se caracteriza porque en su recolección solo se cogen las yemas y brotes nuevos antes de que se abran. Solo se usan dos procesos para su producción: marchitado y secado. Es por lo tanto un té no oxidado y el más parecido a la hoja del té recién recolectada. 

El nombre de "té blanco" se deriva de los finos pelos de color blanco plateado en los brotes no abiertos de la planta del té, que da a la planta un aspecto blanquecino. También se le conoce como el té de la juventud, debido a que es el que más antioxidantes tiene.

Para descafeinar las hojas de té, se utiliza el dióxido de carbono supercítrico. Este disolvente se mezcla con hojas de té oxidadas, después de varias horas, el disolvente y la cafeína disuelta se retiran y se procede al secado de las hojas de té. Las propiedades y beneficios del té negro tras este proceso quedan intactos. Buena infusión estimulante, antioxidante y saciante.

Este té negro es muy aromático y con un marcado sabor cítrico. El Té Negro nos aporta antioxidantes y la teína para mantenernos activos durante todo el día.

Este té negro es muy aromático y con un marcado sabor  a albaricoque y Melocotón. El Té Negro nos aporta antioxidantes y la teína para mantenernos activos durante todo el día.

Te negro chino cuyo nombre científico es Camellia Sinensis. El Lapsang es un té negro que se tuesta sobre brasas de madera fresca de pino y le da ese característico sabor ahumado.  La teína es un estimulante natural que relaja los músculos, despeja la mente y despierta el cuerpo.

El té verde con piña, jengibre y regalíz es un té muy refrescante y aromático que combina los sabores dulces y fragantes de la piña con el perfume del jengibre y el toque de regalíz. Este té verde gusta tanto caliente como fría o incluso con hielo. Potencia las propiedades del té verde con las diuréticas y desintoxicantes de la piña, estimulantes del jengibre y aromáticas del regaliz.

El té verde fruta del dragón es un té muy refrescante, exótico y aromático que combina los sabores dulces y fragantes de la fruta del dragón (pitaya) con  el kiwi y el toque de vainilla, que despliega una experiencia de sabor increíble.

Este té al mismo es un buen antioxidante y muy diurético. Una mezcla muy original, uno de los preferidos por nuestros clientes.            

El té verde más antiguo y tradicional y se caracteriza porque para su elaboración se utilizan las hojas del té sin oxidar. Es por lo tanto un té no oxidado.

Se trata, al igual que el té blanco, de un té con gran contenido en antioxidantes y poca cafeína en comparación con el té negro